ACEITE DE SOJA PARA LA MEMORIA

El aceite de soja, que se obtiene a través del prensado de los granos de esta milenaria legumbre, es uno de los derivados de la soja que más facilmente puede incluirse en la dieta. Conoces sus virtudes:

Buena fuente de grasas sanas
El aceite de soja contiene, en una porción óptima, ácidos grasos esenciales Omega 3 y 6, dos tipos de grasas que protegen el corazón y refuerzan paredes de los vasos sanguíneos.

Una memoria de elefante
Este derivado de las soja destacada por ser un excelente yacimiento de lecitina, un compuesto graso que impide que el colesterol se depositen en las arterias y en las venas. También es esencial en la estructura del tejido nervioso, razón por la que ayuda a mantener activas las funciones cerebrales (memoria, agilidad mental, etc.).

Suave y digestivo
Siempre y cuando sea de primera prensión (sin refinar), el aceite de soja es un buen complemento del aceite de oliva y , al ser más digestivo que el también llamado "oro líquido", es ideal entre aquellas personas que no toleran bien el aceite de oliva. Debido a su sabor neutro, es perfecto para preparar mayonesas caseras de sabor suave y para aliñar verduras y ensaladas sin enmascarar el sabor original de los alimentos. La industria alimentaria emplea el aceite de soja en la elaboración de margarinas y en la conservación de atún o del bonito en lata.

Modo de conservación
A fin de preservar su alto porcentaje en vitamina E, mantenlo al resguardo de la luz, a ser posible en la nevera. Ten en cuenta que esta vitamina antioxidante, capaz de prevenir las cataratas, proteger la piel del envejecimiento prematuro y reducir el riesgo de cáncer, se oxida muy fácilmente.

EL DATO. Como este aceite no soporta bien las altas temperaturas es mucho mas recomendable utilizarlo en frío, en la preparación de aliños o mayonesas, que en frituras.